Lo describiría como la estación con más formalidad en la naturaleza, el complejo poder de renovación que ella posee y la capacidad de supervivencia de muchas de las cosas que nos rodean.
Existe un respeto particular al clima, se aprecia la calidez del hogar, se agradece la luz del sol y hasta la simple sensación de calor que representa tomarse una taza de te caliente. Eso es el invierno, es frío, es gris, es nublado, es lluvioso, es la viva descripción de un clima triste, pero como todo en la vida; dependerá de como lo veas, te pone a prueba la actitud ante la vida, que tan dispuesto estas para enfrentar el día a día con un clima extremo, cubierto bajo capas de abrigos mientras la cordillera con su blanco imponente, nos sopla una bocanada de aire gélido.
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